Estos tratamientos son aplicados antes o después del recubrimiento con zinc. Mejoran resistencia, durabilidad y apariencia de las piezas. Aumentan vida útil y atractivo para clientes finales.
Proceso químico mediante el cual un metal o material se combina con el oxígeno del aire, formando una capa de óxido en su superficie. Esta capa de óxido puede tener diferentes efectos, dependiendo del material y del entorno en el que se produce. En algunos casos, como en el acero, la capa de óxido puede proporcionar protección contra la corrosión al actuar como una barrera entre el metal y el entorno corrosivo.
Oxidación de níquel. Es una sal de formación y mantenimiento.
Oxidación para aleaciones de cobre. Es un aditivo concentrado para acabado marrón cuero
Oxidación para aleaciones de cobre. Es un aditivo concentrado para acabado gris oscuro.
Este proceso elimina el óxido de aluminio y deposita una capa de zinc que protege contra la oxidación futura. El depósito de zinc generado puede ser tratado posteriormente con cobre, níquel u otros procesos electrolíticos o químicos. Esta solución penetra eficientemente en toda la superficie de los artículos de aluminio pulido, generando un depósito de zinc más denso y uniforme que otros métodos convencionales. Esto garantiza una máxima adhesión de cualquier tipo de metal sobre la base de aluminio, lo que reduce rechazos, mejora la calidad y reduce los costos operativos. Además, este proceso ofrece una mayor resistencia a la corrosión lateral y permite condiciones operativas flexibles sin necesidad de un control riguroso.
Solución para el tratamiento del aluminio.
Estos productos son libres de fenol, tolueno u otros disolventes aromáticos, lo que los convierte en una opción de baja toxicidad. Sus propiedades incluyen un inhibidor contra la corrosión, reducción de la volatilidad de los disolventes, alto poder humectante para una penetración eficiente, estabilidad frente a la descomposición de disolventes clorados, y una capa superficial no miscible para facilitar la manipulación y reducir las emanaciones. Se utiliza para eliminar capas de pintura o barniz defectuosos en piezas metálicas, incluyendo aceros, aleaciones de cobre, latón y aluminio, así como para eliminar pinturas acrílicas, vinílicas, epoxi y otros barnices. El tiempo de decapado varía dependiendo del tipo de pintura, con tiempos normales de hasta 5 minutos para una sola capa de pintura, y se recomienda realizar ensayos previos en casos específicos, como perfiles de aluminio pintados con pinturas de poliéster o epoxi-poliéster.
Decapante para barnices sin fenol.
Decapante para barnices con fenol.
Estos productos están diseñados para una amplia variedad de metales. Estos productos consisten en compuestos líquidos concentrados de base crómica que, al diluirse en agua, permiten crear soluciones para proteger por vía electrolítica piezas de cobre, latón y recubrimientos electrolíticos de estos metales, así como recubrimientos de níquel, níquel-cromo, zinc y sus aleaciones. Estos procesos son aplicables tanto en bastidor como en tambor. Se destacan por estar totalmente libres de disolventes orgánicos, su fácil mantenimiento y control, además de brindar una excelente protección contra la corrosión. Es importante prestar atención al tiempo de tratamiento y a la densidad de corriente para evitar cambios de tonalidad en las piezas de cobre o latón durante el proceso de protección.