La gama de productos de BWATERCYCLE Global Smartchem cubren soluciones para el tratamiento de aguas residuales, ósmosis inversa, circuitos de refrigeración, calderas e intercambiadores.
Los productos antiespumante, floculante y coagulante, se utilizan en procesos industriales y de tratamiento de aguas para mejorar la eficiencia y la calidad del agua. El antiespumante se emplea para reducir o eliminar la formación de espuma en diversas aplicaciones industriales, facilitando un proceso más limpio y eficiente. El floculante se usa para aglutinar partículas finas y coloides en suspensión, formando flóculos que se pueden eliminar fácilmente del agua. Por último, el coagulante se utiliza para desestabilizar partículas suspendidas y coloides, facilitando su aglomeración y posterior sedimentación o filtración, mejorando así la claridad y calidad del agua tratada.
En los sistemas de ósmosis inversa, el mantenimiento adecuado de las membranas es crucial para asegurar su eficiencia y longevidad. Para lograr esto, se emplean diversos productos especializados: el biocida para ósmosis inversa previene y controla el crecimiento de microorganismos, evitando la formación de biofilms que pueden obstruir las membranas; los limpiadores alcalinos y ácidos eliminan depósitos orgánicos e inorgánicos respectivamente, restaurando la funcionalidad de las membranas; y el dispersante para ósmosis inversa ayuda a prevenir la acumulación de incrustaciones y depósitos, manteniendo las membranas limpias y operativas. Estos productos trabajan en conjunto para optimizar el rendimiento del sistema y reducir los costos de mantenimiento a largo plazo.
Para mantener y proteger las superficies de acero inoxidable y metales no ferrosos, es crucial utilizar productos de limpieza especializados. El desengrase alcalino para superficie INOX elimina eficazmente aceites y grasas, preparando las superficies para tratamientos posteriores. Los limpiadores ácidos para superficie INOX – N y INOX – S están formulados para eliminar incrustaciones y óxidos, mientras que la versión INOX – N Listo uso ofrece comodidad y eficiencia inmediata. Además, los limpiadores ácidos para metales no ferrosos, disponibles en formato líquido y sólido, están diseñados para limpiar y desoxidar estos metales sin dañarlos, manteniendo su integridad y apariencia. Estos productos garantizan una limpieza profunda y segura, optimizando el mantenimiento y la durabilidad de los materiales.
Para mantener la eficiencia y la durabilidad de los sistemas de refrigeración, es esencial utilizar productos especializados. Entre ellos, el inhibidor de corrosión inorgánico para circuitos de refrigeración protege las superficies metálicas contra la corrosión, mientras que el inhibidor de corrosión para agua blanda y el inhibidor de corrosión para agua dura están formulados específicamente para combatir la corrosión en diferentes tipos de agua. Además, el biocida para circuitos de refrigeración controla el crecimiento microbiano, evitando la formación de biofilms y mejorando el rendimiento del sistema. Por último, el dispersante para circuitos de refrigeración ayuda a mantener las superficies limpias al evitar la acumulación de depósitos y partículas, asegurando un flujo de agua constante y eficiente. Estos productos trabajan en conjunto para optimizar el funcionamiento y prolongar la vida útil de los sistemas de refrigeración.
Para asegurar el funcionamiento óptimo y la durabilidad de las calderas, es fundamental utilizar productos químicos especializados. El antiincrustante líquido para calderas previene la formación de depósitos minerales que pueden reducir la eficiencia del sistema. El inhibidor de corrosión para calderas protege las superficies metálicas internas contra la corrosión, prolongando la vida útil del equipo. Además, el inhibidor de corrosión, antiincrustante y desoxigenante para calderas ofrece una solución integral, combatiendo simultáneamente la corrosión, las incrustaciones y la presencia de oxígeno disuelto que puede acelerar el deterioro de las calderas. Estos productos trabajan juntos para mantener las calderas operando de manera eficiente y segura, reduciendo los costos de mantenimiento y evitando paradas no planificadas.